24 jun 2016

Nunca, jamás.

No cambié nada desde ti,
solo para no ser el mismo.
Quizás abrazarte eran dos pecados,
Pero siempre eran necesarios.

Creo que nunca podremos cerrar,
y digo nunca, jamás,
Lo que tuvimos.
No será fácil mirarnos sin llorar.

Para eso tendremos que afrontar,
lo que había, hay, y habrá.
Para dividirnos entre dos,
después de ser uno, mitad y mitad.

Llamadme cobarde, si queréis,
pero vivo con una duda,
que nadie aguantaría,
sin la ayuda de un buen abrazo.

No me queda si no recordarte,
Reír.
O llorar.
Pero para eso ya elegí no tenerte.

Nunca, jamás.

Aleks Ginsberg "On the road"

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